...Si, desde hace mucho tiempo elegi divorciarme de la amargura, de la tristeza, la envidia y del egoísmo, de los rencores, de las malas caras, de pensar mal de los otros, de las opiniones descalificadoras de los seres humanos, de la soledad, de la ignorancia espiritual, de la hipocresía, de la falta de sensibilidad.
Me he divorciado de la mediocridad, de la arrogancia y petulancia, de los atropellos, de pensar que soy mejor que los demás, elegi decirle adios a todo lo negativo que pueda privarme de ser una persona feliz y honesta conmigo misma.
Así que estoy soltera de esos malos sentimientos, casada con la felicidad a la cuál prometo serle fiel por el resto de mis días.
Elijo ser feliz y vivir esperando el nuevo día con expectativas, crear sueños para luego despertar y comenzar a realizarlos, encontrar amigos que están por estos rincones, esperando que lleguemos y digamos algo bueno, soy feliz de poder hacer la diferencia aún en la distancia.
Saber que con mis palabras pude hacer sentir bien a alguien, que puedo extender mi mano y ayudar sin hacer tanta pompa, simplemente ser feliz de estar viva, agradecer por vivir en este lado del planeta en el que las oportunidades estan a la orden del dia y feliz por poder escribir esta nota.
Soy feliz de poder encontrar este hermoso sentimiento en cosas tan triviales para algunos y tan especiales para mí...
Alejandra Efe