Portal: Equinoccio

Hace 5 años no sabía lo que era un portal. No sabía que existían dimensiones de consciencia más allá del plano físico, lo intuía pero no sabía de qué se trataba.

Mi primer portal lo atravesé casi sin darme cuenta un día de octubre, hace 5 años. Ese día llegué impulsada por el Universo, a mi primer curso de Reiki. Descubrí ahí un mundo cuya existencia intuía, más su entrada parecía lejana.

Como les contaba, atravesé aquella puerta, a ese mundo, sin saberlo. Algo me llevó allí y yo accedí, no sabía que era Reiki (de verdad, ni siquiera sabía que era imposición de manos) me encontré allí con cosas que comprendí mucho  tiempo después, pero lo que sentí fue inigualable. Ese día descubrí que nunca abandonaría ese camino. Salí del curso caminando entre nubes, literalmente en otra dimensión.

Y todo fue diferente desde ese día. Ya no vi el mundo igual, ni a las personas, especialmente cambié la forma de verme a mi misma.

Esa fue mi primera puerta. Con cada nivel de Reiki fui abriendo pequeñas puertas de aquella dimensión, de este mundo del que hablo… hasta la Maestría.

El tercer nivel de Reiki y la Maestría en esta disciplina fueron dos pasos que son uno, cada pie en mi entrada a otra dimensión. Me sumergí en ese momento en mi misma… y en la unidad con todos. Mágico e indescriptible.  Vibré, crecí, cambié.

De este momento surgieron nuevos aprendizajes y caminos. Y aquí te invito a viajar conmigo a mi otro portal, el portal 10.10

Ese día, muchos lo recordarán, me encontraba en Capilla del Monte con Laura Eva y muchas personas más, en un encuentro único e inolvidable. De todas las actividades que compartimos aquel día, la Meditación me movilizó totalmente, me sentí disparada a otro plano… y supe que otra puerta se había abierto. Mi percepción se amplió, mi conexión se potenció… y allí me re-encontré con hermanos y hermanas de camino a quienes agradezco cada día compartirse.

El siguiente portal, es poco más de un año después. Pero no el 11.11… sino el 25.11, el nacimiento de Theo. Pues ese día volví a nacer. Ese día la energía de todo ese año, y especialmente del 11.11 se concentró y canalizó a través de mi ser… lo sentí, lo supe… desde ese momento todo cambió en mi vida. Y no solo por tener un hijo… yo me moví a un nuevo nivel de manifestación, de creación en mi vida.

Este portal me impulsó al siguiente, la Maestría de Registros Akáshicos. Este portal sumó una dimensión más, que yo llamo: Sincronía Total, Sincroacción, Sincrovida.

Hasta ahora ese es el último portal que he vivido… pero siento, y por esto nacen aquí estas palabras, que este Equinoccio ES otro portal más… lo siento vibrar en mí, latir y movilizarse en mi interior… es poderoso, fuerte, luminoso… mágico.

Quiero que sepas que comparto mi tránsito por los portales, porque siento que un Portal es un momento en la vida donde sabes que YA NADA SERÁ IGUAL. Lo puedes sentir en el momento, o no. Pero así es. Cuando sientes que tu Consciencia se expandió, creció… y jamás podrá volver a su tamaño anterior.

Esto es lo que un Portal es, un momento, sincrónico y perfecto, que Te Transforma. Es el Salto Cuántico que te mueve a otra vuelta del espiral. Ya no repetirás lo mismo por costumbre, cambiarás a tiempo, lo verás venir. Desde el Portal muchas cosas quedarán y otras terminarán porque ya no vibras con ellas… pasarás muchos portales, y todos te harán más consciente de diferentes cuestiones… pero todos, sin distinción, te volverán Más Uno con el Todo.

Puedes vivir los portales… sumándote a los Portales que la amada madre Tierra propone en sus ciclos (solsticios y equinoccios) o sumarte a los Portales Galácticos y Numéricos… pero nunca descuides los “pequeños” portales que vives en tus acciones y elecciones… esos son los portales que te transforman interiormente, para integrarte a la gran ola de Consciencia junto a los portales colectivos.

De cada portal, surge un trabajo a realizar… cual será para ti, es un misterio… descúbrelo, acéptalo, vívelo… camina de puerta en puerta, únete a nosotros… Somos Uno vibrando en Amor.

Tammy y sus Maestros de Luz